Seguramente si eres de las personas que le gusta condimentar sus comidas, entre las diversas opciones de especias que existen conoces la cúrcuma.

En su uso culinario, la cúrcuma con su característico color amarillo intenso puede “vestir de dorado” y saborizar platos como carnes, sopas, o guisos, por ejemplo.

Pero su uso no solo se reduce al mundo gastronómico, sino que abarca otros aspectos relacionados a la salud.

En las últimas dos décadas, diversos estudios potenciaron a nivel mundial el valor nutritivo de la cúrcuma, al punto de que mucha gente que nunca la había ni siquiera tocado, ha empezado a consumirla. Tanto como saborizante de guisos y comidas, como en ensaladas e infusiones aprovechando sus maravillosos nutrientes. Acá te contamos qué beneficios tiene el extracto de cúrcuma.

Cúrcuma longa es su nombre científico. Otros nombres coloquiales que recibe son: azafrán de la India, palo de azafrán, palillo, jiang huang o turmérico.

Originaria de la India Oriental, la planta de cúrcuma es de la familia del jengibre. Su raíz es la materia prima de la elaboración del curry en polvo, una mezcla de especias típica en la gastronomía de la India hoy reconocida en el mundo entero.

En su composición, la cúrcuma tiene proteínas, fibras, vitaminas (C, E, K) y minerales la (zinc, sodio, hierro, magnesio, calcio). Y aunque la cantidad de esos nutrientes no es excesiva en la cúrcuma, el polvo es un gran acompañante en la alimentación saludable de los humanos.

Acá te mencionamos varios beneficios que trae consumir el extracto de cúrcuma:

El poder antiinflamatorio de la cúrcuma sirve para aliviar los dolores articulares y el agravamiento que sufren las personas con artritis.

Así lo refieren desde el sitio Medical News Today, donde estudios con resultados positivos al respecto han sido publicados por la Arthritis Foundation.

Además de antiinflamatorio, se cree que la cúrcuma puede actuar también como analgésico para aliviar otro tipo de dolores.

Hay estudios médicos que alumbran evidencias de que la cúrcuma puede tener efectos parecidos al ibuprofeno (advil), por ejemplo.

3. Es un buen antioxidante

La cúrcuma cuenta con propiedades antioxidantes, como el de evitar que distintas toxinas causen dañen al hígado, lo que serviría para mejorar la función hepática.

Esta propiedad podría beneficiar a las personas que por distintas afecciones (como la diabetes) deben tomar remedios fuertes por tiempos prolongados y que en consecuencia pueden dañar su hígado.

Sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias ayudan a mejorar la digestión. Con respecto a este beneficio, desde Medical News Today agregan que, tanto la medicina ayurvédica (medicina milenaria de la India) que hace tiempo utiliza la cúrcuma como un digestivo, y ahora también la medicina occidental, está realizando estudios para comprobarlo en mas patologías.

Como por ejemplo si podría ser efectiva para tratar el síndrome del intestino irritable, para mejorar la permeabilidad intestinal o para reducir la inflamación intestinal, entre otros.

5. Reduce niveles de colesterol y triglicéridos

El consumo de extracto de cúrcuma sirve para mejorar el estado metabólico, y favorece la disminución del colesterol en sangre. Mas precisamente el conocido como “colesterol malo” (triglicéridos y fosfolípidos).

Así lo especifican en un artículo publicado en la guía de las vitaminas por la Dra. Maria Betania Contreras.

Además de extracto, la cúrcuma puede conseguirse en otros formatos como polvo, té, tableta, cápsula, o pasta para las afecciones en la piel, por ejemplo.

Su color amarillo se lo debe a la “curcumina”, una sustancia que “posiblemente” tenga efectos antiinflamatorios y antioxidantes en el organismo.

Estos datos fueron publicados por el Instituto Nacional del cáncer en Estados Unidos, por investigaciones sobre la incidencia de la cúrcuma en la prevención y tratamientos de ciertos tipos de cáncer.

Con respecto a este tema, desde la Clínica Mayo de Estados Unidos, añaden que existen estudios iníciales que están explorando su utilidad en los tratamientos oncológicos porque algunas inflamaciones parecerían tener incidencia sobre el cáncer.

Lo que se busca comprobar es si la cúrcuma puede hacer más lenta la diseminación del cáncer, que la quimioterapia sea aún más efectiva, que proteja a las células sanas de los efectos de la radioterapia y por lo tanto prevenir la aparición de esta enfermedad.

Pero es importante aclarar que todo se encuentra en etapas de ensayo y todavía no hay resultados comprobados que lo avalen científicamente. Pero el hombre, se sabe, está años investigando productos que ayuden a combatir virus y enfermedades. Y la cúrcuma, tan antigua por un lado, es nueva en la alimentación saludable de grandes masas. Y en los estudios médicos.

Finalmente, recordamos que siempre es primordial la consulta con su médico antes de incorporar el consumo de otras alternativas medicinales (especias, suplementos, etc.). Y la Clínica Mayo también advierte que existen evidencias que el consumo de cúrcuma puede llegar a interferir con algunos medicamentos utilizados en quimioterapia. O sea: si se está en tratamiento oncológico, no consumir cúrcuma sino se ha hablado antes con el oncólogo a cargo de la dolencia.